SAN EXPÉDITO

DIFUSIÓN

El culto, contrariamente a lo que se suele leer, no es de origen reciente (es decir, no surgió en Sicilia ni en Alemania en el siglo XVII): ya en la Edad Media existía en Turín el barrio de San Espedito y el santo era el patrón de los comerciantes; además, en Francia, el culto al santo se remonta al menos al siglo XVI. A principios del siglo XX, hubo numerosas controversias en torno a la supresión del culto: en 1905, incluso corrió el rumor infundado de que había sido prohibido.

En la actualidad, San Espedito es conocido e invocado en muchos países, especialmente en Alemania, Austria, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, España, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Italia (especialmente en Sicilia, Campania y Lombardía), México, Nicaragua, Panamá, Perú, Rusia, Turquía, Uruguay y Venezuela.

Seguramente el nombre de Expeditus facilitaba el juego de palabras y así se convirtió en el santo de la velocidad por excelencia. Inicialmente invocado para casos urgentes, se convirtió en el patrón de los comerciantes (por la rapidez en la gestión de los negocios) y de los marineros; por la misma razón también se le reza por los examinadores y por el buen resultado de los juicios.